CUIDADOS DE ENFERMERÍA EN UN PACIENTE CON SÍNDROME DE DISTRÉS RESPIRATORIO: PRIMERA EXPERIENCIA DE ECMO (OXIGENACIÓN POR MEMBRANA EXTRACORPÓREA) EN UCI PEDIÁTRICA

 

AUTORES

Sonia Pujante*, Rosa Maria Segura**, Juan Carlos Monroy*

* Enfermería UCIP Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona

** Enfermera Grupo ECMO. Unidad de Neonatología. Hosp. Sant Joan de Déu de Barcelona

 

 

INTRODUCCIÓN

 

El SDRA (Síndrome de Distrés Respiratorio Tipo Adulto) es una enfermedad pulmonar caracterizada por hipoxemia, con afectación pulmonar bilateral y con exclusión de patología cardiaca.

La etiología puede ser una enfermedad pulmonar (Bronconeumonía, Aspiración, Contusión pulmonar, Ventilación agresiva, etc) o bien una enfermedad sistémica (Shock, Sepsis, etc).       Fisiopatológicamente lo que ocurre es que disminuyen los volumenes pulmonares aumentándose el shunt intrapulmonar y produciéndose hipoxemia. Hay un descenso de la compliance (distensibilidad) de manera que se necesita una mayor presión transpulmonar para conseguir un volumen pulmonar determinado. Esto produce un volutrauma.

Las estrategias terapéuticas del SDRA incluyen:

  1. Ventilación mecánica convencional que tiene como objetivos: mantener una saturación de hemoglobina superior al 90% y una pO2 superior a los 60mmHg con una FiO2 inferior a 0'6. Hipercapnia permisiva manteniendo un Ph superior a 7'20. La modalidad ventilatoria utilizada es Presión control o Volumen control regulado por presión.
  2. La ventilación de alta frecuencia esta indicada cuando es necesaria una FiO2 de 1 durante 24 horas con una presión media de la vía aérea (MAP) superior a 18cm. Se excluyen de ser tratados con alta frecuencia los casos de asma, displasia broncopulmonar y shock intratable.
  3. La posición en decúbito prono a veces es efectiva ya que permite  la buena perfusión de zonas bien ventiladas pero previamente mal perfundidas.
  4. El óxido nítrico esta indicado como medida de rescate en espera de alternativas como VAF o ECMO para evitar  la hipoxemia.
  5. La ECMO esta indicada como ultima alternativa en el SDRA siempre que haya una hipoxemia refractaria a VAF.

 

 

¿QUÉ ES LA ECMO?

 

            Delante de un fracaso respiratorio la última opción terapéutica es la ECMO (Oxigenación por membrana extracorpórea). Ésta permite dejar el pulmón afectado en reposo manteniendo una correcta oxigenación del organismo.

            Consiste en un circuito complejo donde encontramos una membrana oxigenadora y una bomba impulsora. Este circuito se conecta al niño a través de unas cánulas.

            La indicación ECMO puede ser como asistencia respiratoria exclusiva o cardiorrespiratoria, según la patología. Si es necesario asistir hemodinámicamente al paciente, además de sustituir la función respiratoria, es imprescindible emplear ECMO veno-arterial, haciendo un cortocircuito al pulmón y corazón. La sangre venosa llega desde una cánula colocada generalmente en la aurícula derecha a través de la vena yugular interna derecha, devolviéndola, una vez oxigenada, al territorio arterial por una segunda cánula situada en la arteria carótida interna del mismo lado hacia la aorta.

            Sin embargo, cuando sólo es necesario sustituir la función respirtatoria, ya que el gasto cardíaco queda asegurado por el propio paciente se emplea ECMO veno-venosa donde la sangre venosa procedente del paciente, una vez oxigenada, es devuelta de nuevo al territorio venoso, en general a la aurícula derecha. Este sistema puede funcionar mediante el empleo de 1 ó 2 cánulas. Si es una cánula esta puede ser de 2 luces, una para la salida de sangre y la otra para la entrada, o de única luz donde el sistema toma alternativamente sangre y la devuelve al paciente mediante un sistema de clampaje alternativo. Ésta última modalidad con cánula de luz única y bomba no oclusiva, se la conoce como AREC (Asistencia respiratoria extracorpórea).

            Antes de entrar en ECMO el respirador del niño lo encontraremos con respiración agresiva como alta frecuencia, PIPs altas, etc.

            Una vez entra en ECMO este pulmón se deja en reposo para facilitar su recuperación, por ello se programa el respirador con una frecuencia muy baja, 8 ó 9 respiraciones por minuto, y una PEEP alta para evitar el colapso del los alveolos. A esto se lo llama Ventilación apneica.

 

 

 

OBJETIVOS

 

Explicar los cuidados de enfermería y la experiencia del primer caso de ECMO pediátrico realizado en la unidad de cuidados intensivos pediátricos.

 

CASO CLÍNICO

Niña de tres años de edad que ingresó en la UCIP del Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona, procedente de otro hospital, diagnosticada de neumonía bilateral con insuficiencia respiratoria.     Se produjo un empeoramiento clínico por lo que fue necesario intubación y ventilación mecánica manteniéndose una saturación de hemoglobina del 85% con una FiO2 del 100% a la llegada a nuestra unidad. No tiene antecedentes patológicos de interés ni alergias conocidas y la vacunación está al día.

 

            El empeoramiento respiratorio clínico -radiológico fue compatible con SDRA, con hipoxemia refractaria con parámetros agresivos ventilatorios, se inició tratamiento con óxido nítrico durante unas horas. A las 18 horas del ingreso se decidió ventilar con alta frecuencia.

 

Se realizó una valoración de las necesidades básicas según el modelo de cuidados de Virgina Henderson y se establecieron las siguientes actividades de enfermería

 

 

NECESIDAD DE RESPIRAR

VALORACIÓN

CUIDADOS DE ENFERMERÍA

Intubada y ventilada con alta frecuncia

Cuidados habituales del paciente intubado

Aspiración de secreciones exclusivamente en caso de necesidad y con sistema de aspiración cerrado

Colocación en decúbito prono para mejorar la perfusión alveolo-capilar

Realización de técnicas y procedimientos diagnósticos (rx de tórax, gasometrías, aspirado bronquial...)

NECESIDAD DE ALIMENTACIÓN

Dieta enteral absoluta y portadora SNG abierta

Administración de nutrición parenteral por catéter central

 

Cambios de equipos y filtros cada 24 horas

Control de glucosurias y glucemias cada 12 horas

Control de vía de infusión y manipulación aséptica

NECESIDAD DE ELIMINACIÓN

Portadora de sonda vesical

Control de entradas, salidas y balance horario

Administración de furosemida endovenosa continua (0,1 mg/kg/h), asegurando una correcta infusión.

Comprobación que no haya pérdidas de orina que queden sin contabilizar

Control de signos de infección secundarios al sondaje vesical

NECESIDAD DE MOVILIZACIÓN

Sedada y analgesiada

Posición en decúbito prono y gran inestabilidad hemodinámica que limita la movilización

Lateralización de la cabeza cada 4-6 horas

Elevación de la cabeza durante un minuto cada hora

Movilización pasiva de extremidades cada 2 horas

 

NECESIDAD DE REPOSO Y SUEÑO

Sedada y analgesiada

Comprobación de la correcta infusión de la sedación. Comprobar que esté dormida y adaptada al respirador

Control de signos ( aumento tensión arterial y frecuencia cardíaca) o muecas de dolor

 

NECESIDAD DE HIGIENE Y ESTADO DE LA PIEL

No se pueden realizar cambios posturales debido a la inestabilidad hemodinámica. Lesiones en pabellones auriculares

Queratitis y edema palpebral

Colocación de colchón antiescaras

Masaje e hidratación de las extremidades

Lubricante en ojos y oclusión con gasas y suero frío

Limpieza bucal con antiséptico y vaselina en labios

NECESIDAD MANTENER TEMPERATURA CORPORAL CORRECTA

Hipertermia (38,5ºC)

Control horario de temperatura

Medidas físicas para disminuir hipertermia

Administración de antitérmicos ev (propacetamol)

NECESIDAD DE SEGURIDAD

Portadora tubo endotraqueal, tratamiento con fármacos vasoactivos, portadora vias venosas centrales y arterial

Cuidados habituales en ventilación de alta frecuencia

Cuidados y control de las vías endovenosas y arterial

Realizar cambios de fármacos vasoactivos con doble bomba

ACTIVIDADES DE VIGILANCIA Y CONTROL

MONITORIZACIÓN

Frecuencia cardíaca y ECG

Frecuencia respiratoria

pulsioximetría

Presión arterial cruenta

Presión venosa central

CO2 espirada

 

 

Al cuarto día de ingreso, tras persistir hipoxemia, hipercapnia y barotrauma se decidió entrar en ECMO con el sistema veno-venoso AREC. Pero no se consiguió una oxigenación eficaz, continuaba con alta frecuencia y no permitía ventilación convencional. Ante esto a las 28 horas de entrada en ECMO se decidió pasar al sistema veno-arterial. Tras realizar el cambio de cánulas ya se pudo programar una ventilación apneica con una frecuencia de 8 respiraciones por minuto y una PEEP de 9-10.

 

ECMO PEDIATRICA VS ECMO NEONATAL

            La práctica de la ECMO pediátrica supuso un número de cambios del sistema para adaptarlo al tamaño de la niña. Lo primero fue el traslado de todo el personal y el aparataje de ECMO a la UCI pediátrica ya que no se podía ubicar a la niña en la unidad de neonatología.

Para facilitar el débito de ECMO hay que elevar el nivel del niño al máximo y la cama de UCI no subía lo suficiente, por lo que se decidió poner dos colchones.

Fueron necesarios también cambios en el circuito. Se necesitó una membrana oxigenadora más grande que permitía más volumen sanguíneo y más flujo volumétrico de gas. Los cuerpos de bomba, que son los tubos que están en contacto con la bomba impulsora, eran de un diámetro mayor para impulsar más volumen de sangre en cada vuelta. También las cánulas eran de un diámetro mayor para adaptarse al tamaño de los vasos de la niña.

Durante una ECMO hay riesgo de hemorragias ventriculares debido al grado de descoagulación necesario. Por ello se hacen diariamente ecografías transfontanelares que permiten ver este problema.

 

En este caso, esto no era posible. Si se hubiese notado algún síntoma de posible hemorragia se hubiese tenido que recurrir a un TAC y esto supone un traslado muy complicado que no siempre puede realizarse. La prueba que se le realizó periódicamente fue el EEG (Electroencéfalograma).

Después de unas horas de haber iniciado la ECMO, si no hay incidencias, se disminuye la sedación para valorarlo neurológicamente. Éste abre los ojos y mueve algo las extremidades. En este caso, por ser una niña de 3 años podía comunicarse con enfermería, con movimientos de afirmación o negación de la cabeza.

 

 

Realizamos una nueva  valoración, destacando las necesidades básicas en las que ha cambiado la valoración o cuidados durante la ECMO

 

NECESIDAD DE RESPIRAR

Ventilación apneica

Respuesta a la aspiración con bradicardia e hipotensión

Secreciones abundantes y sanguinolentas

Cuidados previos a la aspiración, aumento Fi02 y administración de atropina y relajante muscular

Marcaje de la sonda de aspiración para evitar contacto con la mucosa y produzca sangrado

NECESIDAD  DE MOVILIZACIÓN

Paciente en decúbito supino, con la cabeza lateralizada hacia el lado izquierdo y sin poder movilizarla

Iguales cuidados

NECESIDAD DE REPOSO Y SUEÑO

Paciente parcialmente analgesiada y sedada

Moviliza ojos y boca, y está atenta cuando le hablas, respondiendo con la cabeza. En algunas ocasiones muecas de incomodidad y agitación

Asegurar un ambiente relajado y tranquilo

Hablarle y acariciarle para tranquilizarla

Poner música a través de auriculares

Facilitar la presencia de los padres

NECESIDAD DE HIGIENE Y ESTADO DE LA PIEL

Rasurado de toda la cabeza y colocación en el lado contralateral de la cánula un apósito hidrocoloide

Iguales cuidados de ojos y boca

Movilización pasiva extremidades y masaje. Elevación suave de la cabeza cada hora

NECESIDAD DE SEGURIDAD

Portadora de cánulas de ECMO, descoagulada. Realiza bradicardias sinusales, coincidiendo siempre al desclampar el puente. Bradicardias e hipotensión durante la aspiración

Vigilancia del estado hemodinámico continuo, de signos de sangrado y/o infección. Asegurar que no se caiga de la cama. Vigilancia y control de la aparición de úlceras por presión.

ACTIVIDADES DE VIGILANCIAS Y CONTROL

Se aumenta la monitorización, utilización de paratrend para gasometría en tiempo real

Monitorización d evalores gasométricos

Cuidados y calibración del catéter

 

 

 

A los 10 días de haberse iniciado la ECMO, se procedió a decanular y retirar definitivamente. Al quinto día de haberse retirado la ECMO se extubó, pero su estado respiratorio empeoró y fue necesario volver a intubar. A los 27 días de ingreso se extuba definitivamente, precisando oxigenoterapia y posteriormente tratamiento broncodilatador, dándose de alta de UCIP a los 30 días a planta de pediatría.

 

Realizamos una nueva valoración destacando las necesidades y cuidados que cambiaron tras la retirada de la ECMO.

 

NECESIDAD DE RESPIRAR

Intubada y con ventilación mecánica

Cuidados habituales de destete

Fisioterapia respiratoria intensa

Administración de broncodilatadores

NECESIDAD DE ALIMENTACIÓN

Inicio de alimentación enteral y tres días después alimentación por boca

Colocación de sonda transpilórica, administración de alimentación y control de tolerancia. Dar alimentación por boca

NECESIDAD DE ELIMINACIÓN

Se retira sonda vesical

Retirada y cultivo de sonda vesical

Administración de diuréticos por vía oral

Control de diuresis

NECESIDAD DE MOVILIZACIÓN

Estado hemodinámico permitía la movilización

Cambios posturales cada 2 horas

Masajes y movimientos pasivos de extremidades

NECESIDAD DE REPOSO Y SUEÑO

Aparece síndrome de abstinencia

Administración de la medicación (clonidina oral), proporcionar un ámbiente relajado. Favorecer la entrada de los padres e implicarlos en los cuidados. Utilizar música y el contacto para tranquilizarla

NECESIDAD DE HIGIENE Y ESTADO DE LA PIEL

Lesiones en zona auricular, el resto sin pérdida de la integridad cutánea

Higiene e hidratación de la piel

Control y cuidados de las zonas de presión

 

 

 

ATENCIÓN A LA FAMILIA

Cuando un miembro de una familia sufre una enfermedad y si además requiere la hospitalización en una UCI, con frecuencia se desencadena una situación de crisis tanto para el paciente como para la familia. La familia se ve amenazada por la pérdida del ser querido, separación por el ingreso en la UCI, por lo que el familiar pierde su papel frente al enfermo, deja de sentirse  útil y aparecen sentimientos de abandono y desesperanza. Todo ello induce a una situación de estrés  con ansiedad, nerviosismo, miedo y sentimiento de culpabilidad. Es entonces cuando el personal de enfermería tiene como objetivo disminuir la ansiedad de la familia durante su estancia en UCI mediante la relación de ayuda y para ello realiza actividades como:

-         favorecer la adaptación de la familia  al medio hospitalario

-         crear un clima de confianza  y tranquilidad

-         favorecer la verbalización de sus dudas y preocupaciones y expresión de sus sentimientos ( desempeñar rol de acompañamiento)

-         ofrecer apoyo emocional y ayudarlos en todo el proceso

-         facilitar la información clara y comprensible sobre el estado de su hijo

-         facilitar el contacto con su hijo

-         hacerles participe del cuidado (contacto físico, masaje,.caricias........)

 

 

 

 

 

 

 

 

CONCLUSIONES

 

Este caso que hemos presentado supuso una gran inversión de recursos técnicos y humanos, y un proceso de adaptación y cooperación importante entre el personal de diferentes equipos asistenciales.

La atención integral a la paciente y familia durante todo el proceso, supuso una experiencia enriquecedora técnica y humanamente.

 

 

 

 

 

BIBLIOGRAFÍA

Extracorporeal Cardiopulmonary Support in Critical Care. Second Edition

Joseph B Zwischenberger MD, Robin H. Steinhorn MD, Robert H. Bartlett.

Protocolo ECMO. Servicio de Neonatología. Hospital General Universitario “Gregorio Marañón” Madrid.